La carne de cerdo es la proteína de origen animal más consumida a nivel mundial. Un análisis reciente ha identificado los factores más relevantes que influyen en la percepción del valor de este producto entre los consumidores. A través del estudio de señales intrínsecas (sensoriales) y extrínsecas (comerciales y de presentación), se observa que atributos como el sabor, el olor, la apariencia, el tipo de empaque y la información nutricional y de origen son determinantes en la aceptación y preferencia del consumidor. Comprender estas señales permite a la industria cárnica mejorar el desarrollo de productos, su comunicación y su posicionamiento en el mercado global.
Introducción
La carne de cerdo ha experimentado un crecimiento sostenido en su consumo a nivel mundial. Su versatilidad, disponibilidad en diferentes cortes y formatos, y su aporte nutricional la convierten en una opción destacada en la dieta de millones de personas. No obstante, los hábitos de compra y consumo están cada vez más influenciados por las percepciones subjetivas del consumidor, que valora tanto aspectos sensoriales como informativos al momento de elegir un alimento. Este artículo explora los factores intrínsecos y extrínsecos que influyen en la percepción del valor de la carne de cerdo, con el objetivo de orientar estrategias para la industria cárnica a nivel global.
Claves de percepción del consumidor
Los consumidores no evalúan la carne de cerdo únicamente por su sabor o precio. El proceso de decisión de compra está influenciado por una combinación de factores tangibles (como el color, olor o textura) e intangibles (como la marca, el empaque o la ausencia de aditivos).
Atributos intrínsecos
Entre los factores sensoriales más valorados destacan:
- Color y apariencia del corte: La primera impresión visual genera expectativas sobre la frescura y calidad del producto.
- Olor: Ausencia de olores desagradables o intensos es esencial para una experiencia de compra positiva.
- Sabor y textura: Son los atributos que más inciden en la satisfacción y en la intención de recompra.
- Composición nutricional y contenido graso: Cada vez más consumidores prestan atención a la información nutricional para alinear su dieta con objetivos de salud.
Atributos extrínsecos
Cuando el consumidor no puede evaluar directamente el producto (por ejemplo, cuando está envasado o se adquiere en línea), recurre a señales externas como:
- Precio por kilogramo y promociones: Aunque el precio sigue siendo un factor relevante, no es el único ni el más determinante.
- Tipo de empaque: La preferencia se inclina hacia envases al vacío o empaques transparentes con sellos de frescura.
- Fecha de vencimiento y etiquetado claro: Son considerados indicadores clave de seguridad y calidad.
- Ausencia de aditivos y trazabilidad: La información sobre el uso de conservantes, hormonas o el tipo de alimentación animal influye directamente en la percepción de salubridad y ética del producto.
Segmentos de consumidores
El análisis de datos permite identificar perfiles globales comunes entre los consumidores de carne de cerdo:
- Consumidores sensoriales: Prioriza el sabor, olor y apariencia. Son altamente sensibles a la experiencia gustativa y suelen desarrollar lealtad al producto si la experiencia es positiva.
- Consumidores racionales o informados: Evalúan con mayor peso las etiquetas, certificaciones, origen, información nutricional y condiciones de producción.
- Consumidores sensibles al precio: Su principal criterio de compra es el costo, pero pueden verse influenciados por promociones o descuentos visibles.
- Consumidores indecisos: Tienen dificultad para definir preferencias claras. Su comportamiento puede cambiar según el entorno, la disponibilidad o campañas de marketing.
Implicaciones para la industria
Los hallazgos evidencian la necesidad de que los productores, marcas y minoristas:
- Desarrollen productos con alta calidad sensorial, mejorando sabor, jugosidad y textura.
- Inviertan en empaques funcionales y visualmente atractivos, que transmitan seguridad, frescura y trazabilidad.
- Ofrezcan información clara sobre aditivos, origen, prácticas de bienestar animal y valor nutricional.
- Segmenten su comunicación y promociones según el perfil del consumidor al que se dirigen: sensorial, racional, económico o indeciso.
Conclusiones
La percepción del valor de la carne de cerdo está determinada por un conjunto complejo de atributos sensoriales y extrínsecos. Comprender cómo influyen estos factores en la decisión de compra permite a la industria adaptarse mejor a las expectativas de los consumidores modernos. Apostar por una carne de cerdo de alta calidad, bien presentada y comunicada de forma transparente es clave para fortalecer su posicionamiento en el competitivo mercado global de alimentos.
Referencia
Jordaan, D., Mielmann, A., & Brits, C. (2025). Consumers’ Perceived Value of Pork Meat: A Segmentation on Intrinsic and Extrinsic Cues. Foods, 14(2324). https://doi.org/10.3390/foods14132324